Graciela Ocaña volvió a cuestionar al Gobierno por el veto jubilatorio: «Sostener el equilibrio fiscal a costa del hambre de los jubilados es insostenible»
POLÍTICA Agencia de Noticias del InteriorGraciela Ocaña, legisladora porteña por el bloque Confianza Pública y ex directora del PAMI, expresó su preocupación por la situación de los jubilados tras el veto presidencial a la Ley de Jubilaciones. En una entrevista con CNN Radio, Ocaña afirmó que la decisión del presidente perjudica a los jubilados al negarles una «mínima recomposición» vinculada a la inflación.
«El presidente rechazó una ley que buscaba mejorar la situación de los jubilados, robándoles la posibilidad de una recomposición que estaba en línea con la inflación«, señaló Ocaña, haciendo referencia a los cambios en las fórmulas de movilidad que se implementaron en abril. La legisladora también destacó que la ley incluía un ajuste del 8,5% y un mecanismo para evitar la judicialización del sistema de movilidad, lo que, en su opinión, era crucial para la estabilidad del sistema.
Ocaña criticó la falta de manejo político del Gobierno, señalando que la ley habría sido beneficiosa para el oficialismo, pero que fue vetada en su totalidad. «Era una ley muy buena para el gobierno, pero su falta de manejo político decidió vetarla en su totalidad«, lamentó.
En cuanto al papel del Congreso, Ocaña subrayó que la intención del Parlamento al aprobar la Ley Bases era incorporar la inflación en el cálculo de la movilidad jubilatoria, algo que, según ella, fue ignorado por el Ejecutivo. Además, mencionó que durante el debate del proyecto, varios diputados intentaron dialogar con funcionarios del gobierno nacional, quienes no pudieron ofrecer explicaciones satisfactorias sobre el veto.
«Sostener el equilibrio fiscal a costa del hambre de los jubilados es insostenible a largo plazo«, advirtió Ocaña, y agregó que no se puede seguir «achatando lo que ya está en el piso más bajo». Finalmente, expresó su optimismo de que el Congreso pueda reunir los dos tercios necesarios en ambas cámaras para rechazar el veto presidencial, calificando la medida como «injusta».
Ocaña concluyó con un llamado al presidente, instándolo a salir de la residencia de Olivos y a dialogar con los jubilados sobre sus dificultades diarias. «No es en dólares como hay que medir, sino en la capacidad de la canasta del jubilado», afirmó la legisladora, destacando la urgencia de abordar las necesidades de los mayores con políticas concretas.
Con información de www.elintransigente.com