Boleta Única de Papel: tensión en Diputados por el formato final
POLÍTICA Agencia de Noticias del InteriorLa Cámara de Diputados se prepara para sancionar el próximo martes la ley que implementará la Boleta Única de Papel (BUP) en las elecciones intermedias nacionales del año que viene. Sin embargo, el foco del debate está centrado en un aspecto clave del dictamen: la inclusión o no de un casillero que permita votar por una lista completa, una opción tradicionalmente favorecida por los partidos con mayor representación nacional.
El Senado, en un giro inesperado, modificó la media sanción aprobada en Diputados y eliminó la posibilidad del voto por lista completa. Esta decisión fue el resultado de un acuerdo entre el gobierno y la senadora rionegrina Mónica Silva, además de contar con el respaldo del gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck. Asimismo, el Frente de la Concordia de Misiones, otra fuerza con fuerte anclaje provincial, se sumó a esta alianza y defiende con vigor la versión del Senado.
El conflicto parecía resuelto cuando, la semana pasada, el oficialismo se inclinó por excluir el casillero de lista completa, lo que favorecía a los partidos provinciales frente a las grandes fuerzas nacionales. Sin embargo, una maniobra de último minuto liderada por el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, y Gabriel Bornoroni, jefe de la bancada libertaria, reavivó las tensiones. Estos dirigentes lograron avanzar en un acuerdo con el PRO, la UCR, Encuentro Federal y la Coalición Cívica para restablecer el casillero, ignorando el pacto alcanzado en el Senado.
La decisión enfureció a los representantes de Innovación Federal, un interbloque que aglutina a legisladores de Misiones, Río Negro y Salta, quienes se sintieron traicionados por el giro del gobierno. Pamela Calletti, jefa de dicho bloque, expresó su malestar a Menem, quien justificó que el acuerdo con las fuerzas provinciales solo regía en el Senado, no siendo vinculante para Diputados.
El conflicto adquirió nuevas dimensiones cuando Menem consultó con la Jefatura de Gabinete para evaluar las implicancias de romper relaciones con Innovación Federal, un bloque pequeño pero estratégico para futuros debates como la privatización de Aerolíneas Argentinas o la aprobación del presupuesto. La Casa Rosada sugirió mantener el acuerdo con las fuerzas provinciales y excluir el casillero de lista completa en el dictamen, lo que llevó a reabrir las negociaciones.
A pesar de esto, el desenlace sigue siendo incierto. Durante la votación en particular el martes, una mayoría podría restablecer la versión original de Diputados, con el casillero incluido. En este escenario, Unión por la Patria, informó NA, la bancada más numerosa con 99 miembros, jugaría un rol crucial. Aunque en la votación general el bloque liderado por Germán Martínez se opondrá a la ley, en la votación particular podría apoyar la inclusión del casillero como una concesión ante la inevitable implementación de la BUP.
Para el peronismo, esto podría representar un «mal menor», al aceptar la desaparición de la boleta sábana tradicional, un sistema que defendió por décadas. Sin embargo, el desenlace dependerá de las negociaciones de última hora y las dinámicas políticas que se desarrollen en el recinto.
La próxima sesión promete ser decisiva no solo para el futuro de la BUP, sino también para la configuración de alianzas políticas en el Congreso en un contexto de alta incertidumbre.
Con información de www.elintransigente.com