Juntos por el Cambio encara la negociación interna más difícil y la UCR sale a marcarle la cancha al PRO

En Juntos por el Cambio la interna por la candidatura presidencial se vuelve cada vez más inevitable y la UCR lanza esta semana a Gerardo Morales como nuevo contendiente. No obstante, distintos sectores de la alianza opositora buscan abrir una negociación para llegar a las primarias (PASO) con una única lista de diputados y senadores nacionales.

Según distintas fuentes del espacio consultadas por iProfesional la idea surge principalmente del radicalismo y de la Coalición Cívica, aunque en el PRO también hay voces a favor de ir por ese objetivo. No obstante, todos coinciden en que no es algo sencillo, ya que requerirá de un acuerdo entre los líderes de la alianza, de los cuales ya varios están lanzados o en carrera para las PASO presidenciales.

En la coalición creen que la estrategia definitiva para las elecciones empezará a tomar forma entre fines de marzo y fines de abril. En ese período, estiman, debería resolverse cuál será la oferta de precandidatos para las PASO (si jugarán todos los que se mencionan o alguno se baja) y despejar la interrogante sobre si los competidores podrán llevar la misma lista de candidatos al Congreso.

La idea es resguardar de la pulseada presidencial a las listas de candidatos para el Congreso en las distintas provincias del país o al menos en todas las que se pueda y cuidar así lo que algunos consideran el principal capital político de la coalición: los bloques legislativos que reflejan la unidad del espacio y que en el último tiempo lograron condicionar la agenda parlamentaria del oficialismo.

Juntos por el Cambio: ¿por qué la lista de candidatos al Congreso es la negociación más difícil?

El plazo para definir las candidaturas culmina el 24 de junio, por lo que las negociaciones podrían extenderse a mayo. Además, la integración final de las listas de diputados y senadores suele demorarse hasta el último minuto. Esto grafica una parte de las dificultades que tendrá la negociación que se intenta abrir.

El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, se lanzó sin marcha atrás posible y la presidenta del PRO, Patricia Bullrich, se para como su principal competidora, mientras María Eugenia Vidal juega a sumarse a la disputa y todos esperan una definición del ex presidente Mauricio Macri. Morales oficializará su precandidatura por la UCR el próximo miércoles y la líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, ya avisó que está dispuesta a competir.

Las listas legislativas juegan un rol fundamental en ese baile de nombres. Una fuente del radicalismo evaluó ante iProfesional que si todos llevaran la misma nómina de diputados y senadores "la competencia sería más pareja, con más igualdad de condiciones" para los presidenciables.

En cambio, si cada precandidato lleva su lista legislativa, la nómina final para las elecciones generales -en las que se elegirán 130 diputados y 24 senadores- surgirá de intercalar los nombres de quienes compitieron en las PASO "y van a quedar varios heridos, más allá de que la interna se puede poner muy áspera", según la fuente.

La UCR planta candidato: Morales y una demostración de fuerza para la interna 

Una de las claves está en la cantidad de bancas que arriesga cada partido de Juntos por el Cambio en el Congreso. En la Cámara de Diputados, la UCR pone en juego 17 de los 33 lugares que ocupa, el PRO 24 de 50 y la Coalición Cívica con 7 de sus 12, casi todo su bloque. Nadie quiere perder representación.

Un eventual acuerdo para tener listas únicas en todas las provincias donde se pueda les permitiría a los miembros de la coalición mantener en buena medida los lugares que hoy ocupan y preservar así un equilibrio interno que sería importante si les toca gobernar a partir de 2024.

Quienes viven dentro de la interna de Juntos por el Cambio estiman que el lanzamiento de la candidatura de Morales prevista para el próximo miércoles en el Teatro Gran Rex puede servir para llevar adelante esa difícil negociación. El presidente de la UCR buscará dar una demostración de fuerza del partido con el apoyo del espacio radical que lidera el porteño Martín Lousteau.

Mientras la interna del PRO entre Rodríguez Larreta, Bullrich y Vidal, con Macri como árbitro y todavía no descartado del todo como jugador hace que Juntos por el Cambio gire hoy alrededor del partido amarillo, el lanzamiento de Morales con Lousteau ya parado como precandidato en la Ciudad le daría a la UCR una posición más fuerte.

"No es lo mismo sentarse a negociar listas o incluso el programa y los cargos de un futuro gobierno como furgón de cola que con un armado propio", graficó una fuente del radicalismo consultada por ese medio. El análisis es que la UCR -o al menos ese sector que integran Morales y Lousteau- está sacando pecho para el momento en que todos tengan que sentarse a definir cómo serán las listas.

Es la misma evaluación que se hizo dentro de la alianza cuando Carrió anunció su precandidatura presidencial para las PASO: un intento por posicionarse para defender el lugar de su partido en la coalición de cara a la negociación por el armado electoral, con la mira en las bancas del Congreso.

¿Llegarán todos a las PASO?: especulaciones y una señal desde Córdoba

Detrás de esas evaluaciones se esconde la especulación que todos hacen pero ningún dirigente de primera línea confesaría jamás: que en el recorrido que queda hasta la definición de las candidaturas alguno se baje y la oferta de precandidatos a presidente y a otros cargos ejecutivos para las PASO se reduzca.

En el trajín de la campaña, operadores de los distintos partidos de Juntos por el Cambio no ocultan la sospecha de que en ese armado final solo queden Larreta y Bullrich, los dos que mejor miden hoy en las encuestas, a través de un acuerdo más amplio entre el PRO, la UCR, la Coalición Cívica y los otros espacios que integran la alianza.

Allí es donde entran a jugar como posibilidad alquimias tales como la lista unificada de diputados y senadores o las "fórmulas cruzadas" de las que se habla recurrentemente, con un postulante del PRO acompañado por un radical o viceversa. Son elementos que ayudan a preservar la unidad a pesar de la competencia interna.

En los últimos días hubo una señal en ese sentido en la provincia de Córdoba, donde está camino a cerrarse el acuerdo entre el senador del PRO Luis Juez y Rodrigo de Loredo, diputado de Evolución Radical (la línea de Lousteau) para terminar con la pulseada por la candidatura a gobernador.

Ambos pulsearon y se disputaron apoyos durante los últimos meses pero mantuvieron el contacto con todos los referentes nacionales, de Macri a Morales y de Larreta a Bullrich, más allá de las fotos con uno u otro, y finalmente acordaron ir en la misma lista. Lo mostraron de forma curiosa: con un video en el que se los ve compartir un "fernet con coca", bebida característica de los cordobeses.

Fuentes del PRO cordobés señalaron a iProfesional que ambos aceptaron que una encuesta defina quién será el candidato a gobernador. Podrían ser parte de una misma fórmula (como el Fernet y la Coca Cola) aunque también circula la versión de que De Loredo podría presentarse como intendente de la capital.

* Para www.iprofesional.com