¿Tendrá la solución?

¿Puede sacar un conejo de la galera?, ¿La dolarización está al caer?, ¿Es posible esquivarle a las esquirlas que haber bajado el paquete fiscal va a producir?. Todas estas preguntas nos hacemos con mucha preocupación y la respuesta solo la tiene el Presidente de la Nación. Ojalá el conejo salga de esa galera que la mayoría de los Argentinos mira con esperanza, es seguramente lo que todos anhelamos, la mecha es corta y la paciencia, principalmente de los propios, es poca, casi ínfima. 

El Presidente de la Nación tuvo que barajar y dar de nuevo, que nadie piense lo contrario. El haber retirado el paquete fiscal no es otra cosa que un gran paso en falso a tan solo 45 días de asumir la máxima magistratura más allá que se intente dar otra imagen.

 
Los gobernadores le torcieron el brazo y la segura derrota en diputados era una realidad, prefirió aparentar otra cosa y evitar el escarnio de la derrota.

El grave problema es que ya le tomaron el tiempo y le será muy difícil generar consenso en el futuro, la salida del Ministro Francos y del Presidente de la Cámara de Diputados Martín Menem es una cuestión de tiempo y más temprano que tarde se va a producir.

El recorte de partidas a las provincias es inevitable y eso es literalmente jugar con fuego: No se puede gobernar en Argentina enfrentado con todos los gobernadores, es suicida. El último presidente que perdió por completo el apoyo de los gobernadores fue Adolfo Rodríguez Saa, ya sabemos todos como fue el final.

Argentina no tiene plan económico, lo que hasta ahora hay son parches ante una situación recibida catastrófica, pero plan no es. Es necesario que se tomen medidas urgentes por que los mercados cuando comienzan a observar debilidad se aprovechan de una manera salvaje.

Argentina no aguanta muchos meses en la situación que hoy está, los mismos que hace poco más de dos meses salieron a festejar la llegada de alguien nuevo y alejado de los políticos de siempre que desde hace 40 años gobiernan la Argentina, van a ser los primeros en desempolvar las cacerolas y se van a hacer sentir con mucha fuerza, eso es inevitable y en el gobierno lo saben.

Nada de lo que Milei hace está librado al azar, quienes sostienen lo contrario sencillamente lo menosprecian infantilmente. El presidente declaró que no estamos lejos de la dolarización y dejó bien en claro que esa será la única manera de ganarle la batalla definitiva a la inflación.

El gran problema de Argentina es la inestabilidad económica, el bolsillo es el principal escollo para este pueblo castigado y vapuleado desde hace tantos años. Que nadie se engañe, la inseguridad es un problema que lo sufren los que la padecen, pero la gran mayoría solo quiere vivir mejor y que el sueldo les alcance, que ir al supermercado no sea un suplicio y que los aumentos no sean diario ni mensuales, los Argentinos ansían vivir sin inflación y por eso los que tienen  memoria anhelan los noventa.

Marzo es el mes clave, el gobierno lo sabe. ¿Será también el mes en el que se anunciara un verdadero y revolucionario plan económico?, solo Milei lo sabe, pero también sabe que el margen es muy chico y que a medida que pase el tiempo todo se va a hacer más difícil. 

Las medidas tomadas hasta ahora no solucionan nada, Milei seguramente tiene un plan serio para proponerle a los Argentinos, lo que nadie sabe es cuando lo ejecutará.

No se puede jugar con fuego, es muy peligroso, ojalá el Presidente lo advierta, ojalá tenga a su alrededor gente que tenga la capacidad de contradecirlo o de no tentarse con el "si Javier", ojalá nadie salga quemado en esta Argentina que pide a gritos retomar el sendero de la prosperidad que tanto nos merecemos y que en 40 años nadie pudo lograr.